Herrera perteneció a la Villa de Ucero, tenía derecho a dos representantes, estos representantes participaban en la elección del Alcaide del Castillo, sus habitantes entre los derechos que tenían, era el de poder pescar en los ríos del término de la jurisdicción de la villa de Ucero.
Las rentas o Alcabalas que este pueblo pagaba, iban a las arcas del Excmo. Marques de San Leonardo Conde de Castro, porque se las había vendido en empeño El Rey Felipe IV
En el término Municipal de Herrera de Soria existe un monte en pro indiviso, de titularidad privada.
En el siglo XIX el monte era propiedad de sus vecinos o Ayuntamiento. Con la desamortización, (conocida como ley de Mendizábal) a Herrera se le perjudicó enormemente, puesto que se le expropia su monte, lo sacan a subasta y lo tienen que comprar los propios vecinos, puesto que sin el monte les era imposible subsistir.
El 21 de Febrero 1905 en el Boletín Oficial de Estado, sale publicada la venta de este monte y el remate para el día 18 de abril de 1905, a las 12 horas, en el Palacio de Justicia de Madrid, y en los Juzgados del Burgo de Osma y Soria.
Este monte lo compra un señor, cede 43 partes a otros tantos vecinos, todos de Herrera y el se queda con una parte, como avían dispuesto previamente la mayoría de sus vecinos.
Como los compradores no disponían de los suficientes recursos, deciden vender el arbolado por cuarenta años, teniendo derecho a las leñas y madera para construcción de nuevos edificios, o reparación de los ya levantados, en caso de deterioro o siniestro.
Durante estos cuarenta años este monte fue muy castigado, habiendo grandes de incendios, en lo que se quemo un 50 %, todas las zonas mas pobladas y de mejor calidad.